Una suscriptora de Éxito Empresarial, Estela Jiménez, me contactó recientemente y me contó sobre cómo los ingresos de su negocio dejaban mucho que desear. ¿Podría yo sugerirle cómo «levantar» el negocio?

Hace casi cuarenta años y junto con su esposo Gerardo (¡ambos septuagenarios y sin miras de jubilarse!) Estela se inició en el negocio de las flores. En el correr de los años, abrieron otras tres florerías más. El negocio marchaba bien hasta hace varios meses atrás, cuando los supermercados comenzaron a instalarse cerca de sus tiendas y se llevaron casi todos sus clientes.

Como la mayoría de los pequeños y medianos empresarios, Estela y Gerardo no tomaron acción inmediata para atacar la caída de las ventas. Llegó al punto en el que si las ventas no comenzaban a subir rápidamente, no solo el negocio estaba en peligro, sino también hasta su propia casa.

Desafortunadamente, esta situación era predecible. ¿Por qué? ¡Porque no estaban haciendo nada de marketing efectivo! Al igual que muchos comerciantes, la forma principal de obtener clientes era abrir sus puertas, tener productos de buena calidad (en el caso de Estela de excelente calidad), u ofrecer un buen servicio, poner un anuncio tradicional en las Páginas Amarillas, más algún aviso cada tanto en el periódico local, y esperar que lleguen las ventas. ¡Esto NO es suficiente!